El humo sale de mi boca
De mis ojos una lágrima que brota
Y es que estoy empezando a asumir
Que tu cuerpo no estará presente
Cuando termine de llorar
Siempre será tu maullido femenino
El que escucharé más fuerte
Aunque ya no estés aquí,
aunque ya no suene.
Aunque no te pueda hacer cariño,
y no vengas a mi cama a ronrronear.
(Alma, te amaré por siempre)
No hay comentarios:
Publicar un comentario